10 restaurantes porteños que honran la tradición italiana en el día mundial de la pasta

El 25 de octubre se conmemora una de las preparaciones más icónicas de la gastronomía mundial. En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, la herencia italiana cobra vida en los platos de diversos restaurantes que se destacan por sus propuestas artesanales y sabores inigualables.

Desde 1998, el 25 de octubre se celebra el Día Mundial de la Pasta, una fecha que rinde homenaje a uno de los platos más queridos y consumidos en todo el mundo. En la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, la cocina italiana ocupa un lugar central en la cultura gastronómica, y muchos restaurantes porteños se destacan por su enfoque en la calidad, tradición y modernización de las recetas italianas. A continuación, te presentamos una selección de diez lugares en los que la pasta es la protagonista, con opciones que abarcan desde preparaciones clásicas hasta innovaciones que no te dejarán indiferente.

Con más de dos décadas de experiencia, el chef Leonardo Fumarola sigue siendo un referente de la cocina italiana moderna en la Ciudad. Su restaurante, L’Adesso, ubicado en el corazón de Palermo, ofrece una carta con ocho variedades de pasta casera que rescatan las recetas tradicionales con un toque de modernidad. Entre las opciones destacadas se encuentran los fettuccine ai funghi, una pasta fresca acompañada de una mezcla de hongos, el clásico cacio e pepe, y los pappardelle di castagne, hechos con harina de castañas y servidos con ragú de jabalí. “Cada plato es una expresión de mi amor por la cucina italiana”, asegura Fumarola.  

Ubicación: Fray Justo Santamaría de Oro 2047, Palermo.

En la esquina de Honduras y Gascón, La Alacena se ha consolidado como uno de los favoritos de los porteños que buscan una pasta artesanal con sello italiano. La chef Julieta Oriolo, quien también es la propietaria, ofrece una carta donde cada plato busca el balance perfecto entre técnica y sabor casero. Entre las opciones más populares, los capeletti allo zafferano y los ravioli de ternera son elogiados por su textura y frescura. “Aquí la pasta no es solo un plato, es una celebración de mis raíces italianas”, afirma Oriolo.  

Ubicación: Gascón 1401, Palermo.

Evelia, en el barrio de Núñez, se ha convertido en una sensación en la escena gastronómica de la Ciudad. El chef Máximo Togni ha creado un espacio donde las pastas destacan por su elaboración meticulosa y su presentación impecable. Las reservas son difíciles de conseguir debido a su creciente popularidad, pero quienes logran una mesa disfrutan de delicias como los ñoquis de papa al pesto genovés, los tortelloni de queso 4 Esquinas y jamón cocido, o los fusilli al fierrito con ragú boloñés. “Queremos que cada plato cuente una historia de sabor y tradición”, comenta Togni.  

Ubicación: Campos Salles 1712, Núñez.

En el barrio de Belgrano, Biasatti se ha ganado una reputación gracias a sus pastas caseras hechas con sémola de grano duro y huevos de campo. La dupla detrás de este restaurante, Stefania Langford y Milton Bertoni, se dedica a plasmar la esencia de la cocina italiana en cada plato. Entre sus especialidades, los ravioli de ossobuco con espinaca y los pappardelle con alcauciles son una opción imperdible para quienes buscan una experiencia gastronómica auténtica.  

Ubicación: Ciudad de La Paz 1917, Belgrano.

El chef Daniele Pinna, originario de Cerdeña, lidera La Locanda en Palermo Chico, donde fusiona la tradición italiana con toques innovadores. Las pastas frescas son el alma de este restaurante, y entre los platos más destacados se encuentran los spaghetti con salsa de limón y carpaccio de langostinos, así como la lasagna de pasta verde de espinaca con ragú de jabalí. “Mi objetivo es que cada plato transporte a los comensales a Cerdeña”, dice Pinna.  

Ubicación: José León Pagano 2697, Palermo Chico.

En el corazón de Palermo, Carmen se distingue por sus creaciones originales que mezclan la tradición italiana con influencias británicas. El chef Nacho Feibelmann sorprende con propuestas como el raviolón frito relleno de mozzarella y pesto, y la girandola rellena de batata con castañas y parmesano. Para los amantes de los clásicos, el cacio e pepe es una opción que no falla.  

Ubicación: Gurruchaga 1426, Palermo.

Famosa por sus pizzas romanas, la cantina Cosi Mi Piace también es conocida por la calidad de sus pastas caseras. Entre las más pedidas están los torteletis Barbabietola, con masa de remolacha y relleno de ricota y pecorino. La versatilidad de las salsas, que incluyen opciones como carbonara, pesto o langostinos, permite combinar las pastas según el gusto de cada comensal.  

Ubicación: El Salvador 4618, Palermo Soho.

Aldo’s, en Palermo Hollywood, ofrece una experiencia que marida sus exquisitas pastas con una selección de más de 700 vinos. Entre las propuestas, se destacan los orecchiette a la Mediterránea, hechos a mano y servidos con langostinos patagónicos, así como los tagliatelle ripieni rellenos de calabaza. “Aquí todo gira en torno al equilibrio entre la pasta y el vino”, afirma el dueño, Aldo Graziani.  

Ubicación: Arévalo 2032, Palermo Hollywood.

Sottovoce, un ícono de la cocina italiana en el barrio de Recoleta, sobresale por sus pastas caseras y su ambiente elegante. Entre las opciones más recomendadas están los spaghetti negro con langostinos, preparados con tinta de sepia, y el rótolo alla bolognese, un rollo de pasta relleno de carne y parmesano.  

Ubicación: Avenida del Libertador 1098, Retiro.

Con varias sucursales en la Ciudad, La Parolaccia se mantiene fiel a la tradición de la cocina italiana. Sus pastas artesanales, como los ravioli verdi scarparo y los spaghetti ai frutti di mare, son opciones que nunca decepcionan. “Aquí nos enfocamos en ofrecer recetas clásicas que respeten la esencia de la cocina italiana”, aseguran desde el restaurante.  

Ubicación: Riobamba 1046, Barrio Norte.

El Día Mundial de la Pasta es una excelente excusa para disfrutar de uno de los platos más queridos del mundo y una oportunidad para valorar la rica herencia italiana en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Estos diez restaurantes porteños representan lo mejor de la tradición y la innovación en la cocina italiana, permitiendo a los comensales disfrutar de sabores que, con cada bocado, los transportan a las raíces de la “bella Italia”.